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La hipocresía y demagogia políticas de CPDS

CPDS y algunos políticos de su entorno aprovechan estos días la pandemia COVID-19, que asola al mundo, para lanzar críticas y recriminaciones contra el Gobierno de Guinea Ecuatorial, e intentar rentabilizar políticamente esta dramática enfermedad.

Un breve y atento análisis de las declaraciones realizadas en estos días por los partidos y activistas de la oposición radical de nuestro país, en torno a las medidas adoptadas por Gobierno del Partido Democrático de Guinea Ecuatorial contra el COVID-19, nos muestra a todas luces el carácter más bien interesado y netamente político de las mismas, en estos críticos momentos en los que sólo se requiere aunar esfuerzos por luchar contra esta pandemia que nos afecta a todos por igual.

Partimos de la base de que, en cualquier democracia, la oposición -es decir, los partidos políticos legalizados-, tienen el derecho de escudriñar, criticar y denunciar, si es necesario, cualquier medida tomada por el Gobierno. Pero es menester poner de relieve, muy particularmente, algunas declaraciones como las que ha realizado el partido Convergencia Para la Democracia Social (CPDS), que ha lanzado un documento de recomendaciones al Gobierno, en el que claramente critica las medidas adoptadas contra el COVID-19.

Para empezar, uno tiene la sensación de que las propuestas de CPDS son un simple “copiar y pegar” de las medidas preconizadas por los partidos de países extranjeros que apoyan política y económicamente a CPDS, sin tener en cuenta las enormes diferencias entre estas naciones con Guinea Ecuatorial. Y es que una cosa es tener en consideración y respetar las medidas universalmente aceptadas y establecidas por la Organización Mundial de la Salud (OMS) para frenar la propagación de la pandemia, y otra muy distinta “copiar y pegar” en Guinea Ecuatorial, medidas de otros países cuyas circunstancias y características son totalmente distintas al nuestro.

Las cifras relativas al número de contagiados (que se estiman en estos momentos en catorce casos positivos en nuestro país), la evolución progresiva de la expansión de la pandemia a nivel nacional, así como el número de fallecidos y otras consideraciones sanitarias y socioeconómicas han de constituir los principales parámetros técnicos y estratégicos a considerar, a la hora de tomar las medidas preventivas por parte de cada Estado afectado por el COVID-19.

Estimamos que las medidas adoptadas por cada país para hacer frente a esta pandemia deben ser proporcionales al volumen de sus respectivas poblaciones, al volumen de recursos disponibles, así como al número de casos registrados en cada uno de ellos; amén de otras imprevisibles consecuencias que puedan surgir en torno al COVID-19.  Y esto requiere un análisis situacional específico para no ir tirando balas al aire en nuestra guerra colectiva contra esta cruel y poderosa pandemia.

Consideramos que, antes de hacer sus declaraciones y propuestas, CPDS hubiera debido consultar a las autoridades del Gobierno de Guinea Ecuatorial, e incluso al mismo Presidente de la República, como lo ha hecho en otras ocasiones. De esa forma, se hubiera informado mejor sobre las medidas adoptadas para luchar contra esta pandemia, que en estos precisos momentos, requiere una acción colectiva de todos los componentes de la sociedad ecuatoguineana y de la humanidad.

Como ejemplo de la irresponsabilidad y la ignorancia de CPDS tenemos un hecho reciente: hace semanas, nuestro Gobierno realizó una donación a China cuando este país amigo estaba sufriendo la fase más dura del Coronavirus. En aquellos momentos, mediante un comunicado de fecha de 6 de febrero, la Comisión Ejecutiva Nacional de CPDS criticaba al Gobierno duramente por haber realizado esta donación. Sin embargo ahora, en su último comunicado, CPDS recomienda al Gobierno “recurrir a la cooperación internacional, pidiendo apoyo técnico y material a China”.

CPDS olvida que gracias, precisamente, a esta cooperación continua con China, y gracias también a aquella donación que ellos criticaron tanto, ahora el Gobierno chino nos ha enviado considerable cantidad de material sanitario y clínico para la lucha contra el COVID-19. En general, CPDS olvida que, gracias precisamente a la cooperación y la gestión del mismo Presidente de la República y Fundador del PDGE con China y otros países amigos, ahora en Guinea Ecuatorial ya hemos recibido esa respuesta solidaria por parte de China. Es decir: en menos de un mes, CPDS se contradice a sí mismo en público, nos ofrece propuestas que hace solo un mes estaba criticando. ¿Son conscientes los políticos de CPDS de su contradicción, hipocresía y demagogia? Creemos por la poca seriedad que nos muestran que no son del todo conscientes de que estamos en un momento crítico, con una pandemia que está causando estragos, incluso en los países más avanzados del mundo.

También consideramos que los líderes políticos de un país deben dar ejemplo de ética, moral y responsabilidad política; por eso, nos parecen verdaderamente irresponsables las declaraciones realizadas por algunos de los políticos asociados a CPDS, como el autodenominado activista de derechos humanos, Paysa Elo Ayeto, que ha llegado a afirmar que “la pandemia del COVID-19 beneficia” a nuestro Gobierno. Estas declaraciones resultan execrables en este momento y son un ejemplo total de cómo los políticos de CPDS están dispuestos a utilizar impunemente la pandemia de COVID-19 como arma política.

En definitiva, desde PDGE hacemos un llamamiento al CPDS y a la oposición radical en general, para que -para variar- actúen con altura de miras, arrimando el hombro en esta situación sin precedentes a nivel mundial, que nos afecta a todos, y contribuyan positivamente en la lucha contra la pandemia, en vez de aprovechar este drama humanitario para intentar conseguir réditos políticos. Son momentos de trabajar unidos, y no de críticas absurdas y contradictorias. La historia, sin duda, valorará la actitud que tuvo cada uno en este momento excepcional.

Departamento de Prensa del PDGE

marzo 31, 2020